Muchos de ustedes nos preguntan acerca de qué es la ira, cómo responde una persona con ira, los diferentes tipos de ira, cómo controlarla, etc. A continuación vamos a desarrollar el tema de la ira y trataremos de dar información al respecto, para que les pueda ser de utilidad.
La primera pregunta que nos hacemos es: ¿Qué es la ira?
Índice de contenidos
¿Qué es la ira?
La ira es una emoción básica que todos los seres humanos tenemos. Suele encontrarse presente en las situaciones donde haya conflicto. Esta puede darse contra nosotros mismos o contra los demás. La ira puede ir desde una muy leve irritación hasta la furia más intensa.
3 respuestas en la persona con ira
Para una mejor comprensión de la ira, la hemos dividido en tres tipos de respuesta que por lo general suele tenerse.
Somática o corporal
Nuestro cuerpo se va a preparar para el ataque o una defensa posible. La respiración se empieza a agitar, aumentan los latidos cardíacos, la musculatura se pone tensa, y hay un mayor flujo sanguíneo. Todo esto es como una especie de preparación ante la supuesta amenaza que el sujeto percibe.
La interpretación de la situación
La interpretación de lo que pasa va a estar estrechamente vinculado con los pensamientos que el individuo tiene ante lo que vive, o sea su reacción cognitiva. Lo que piensa es fundamental, porque tiene una relación estrecha en el momento de desencadenar emociones.
Por lo general, la persona con ira suele interpretar o pensar determinadas situaciones como un abuso, injusticia, una falta de respeto, humillación, etc.
Algunos pensamientos que pueden tener son: “Esto no lo puedo tolerar”, “nadie me va a tratar así”, “me están tratando como a un estúpido”, “esto es inaceptable y no lo voy a permitir”, etc.
La conducta manifestada
La conducta o comportamiento manifestado por parte del individuo con ira, apunta contra aquello que de alguna manera representa un obstáculo para el logro de sus objetivos.
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5 tipos de ira
Como habíamos señalado con antelación, la ira es una emoción básica que todo ser humano tiene, como pueden ser la alegría, el miedo, la sorpresa, asco, desprecio, y la tristeza.
El hecho de que sintamos enojo, enfado o ira no es problema. Todo esto va a depender, de la intensidad de la emoción que nos habita y la manera en que la podamos expresar o tramitar.
A continuación desarrollaremos los 5 tipos de ira:
Agresión como una explosión
Son individuos que de un momento a otro pueden perder el control y no se sabe cuál podía ser la razón. Todo esto está vinculado con su baja tolerancia la frustración, falta de paciencia y porque las cosas que ocurren en su vida, no se dan como ellos quieren.
Conducta violenta y agresiva
Este tipo de conducta se da en sujetos que usan este tipo de ira y violencia para obtener lo que ellos quieren. Logran su objetivo descargando su ira contra el obstáculo que evita momentáneamente cumplir con lo que ellos desean. O sea, la ira o violencia es un medio para un fin.
Ira contenida y su explosión
Esta forma de ira, es muy común en aquellas personas que suelen aguantar situaciones de injusticia o que los haya lastimado mucho. Son como una especie de volcán que ha aguantado su erupción hasta que finalmente explotan y lanzan toda la lava que estuvo guardada por mucho tiempo en el interior. Podríamos decir, que han acumulado muchas frustraciones y no las toleran más.
La ira como un mecanismo de defensa
Este tipo de ira es la que se produce cuando la persona siente que va a hacer atacada o está en un verdadero peligro. De ahí, que actúe exclusivamente como una defensa o supervivencia ante la situación que lo puede destruir.
Sujeto pasivo agresivo
El sujeto pasivo agresivo, manifiesta de una manera indirecta o camuflada su agresividad. Por ejemplo, el jefe le pide algo a su empleado, y este realmente no quiere hacerlo. Pero no le dice a su jefe directamente que esa tarea no la quiere hacer, sino que le manifiesta que la va a hacer. Por supuesto que va a demorar la entrega de la tarea que le pidieron o de alguna u otra forma saboteará la resolución de dicha tarea.
10 CONSEJOS DE MAYO CLINIC PARA EL CONTROL DE LA IRA
Vamos a desarrollar 10 consejos que tomamos de la Clínica Mayo y que pueden ser de gran ayuda para controlar la ira.
1. Piensa antes de hablar
En un momento de enojo, es fácil decir algo de lo que luego te arrepentirás. Tómate unos momentos para ordenar tus pensamientos antes de decir algo, y permite que las otras personas involucradas en la situación hagan lo mismo.
2. Una vez que te tranquilices, expresa tu ira
Tan pronto como puedas pensar con claridad, expresa tu frustración de una manera asertiva pero no confrontativa. Comunica tus preocupaciones y necesidades de manera clara y directa, sin herir a los demás ni tratar de controlarlos.
3. Haz un poco de ejercicio
La actividad física puede reducir el estrés que te puede provocar enojo. Si sientes que aumenta tu enojo, sal a correr o caminar enérgicamente, o dedica un tiempo a hacer actividades físicas que disfrutes.
4. Tómate un tiempo para reflexionar
Los tiempos para reflexionar no son sólo para niños. Date pequeños descansos en los momentos del día que tienden a ser estresantes. Algunos momentos de tranquilidad pueden ayudar a que te sientas mejor preparado para manejar lo que sucederá después sin irritarte o enojarte.
5. Identifica las posibles soluciones
En lugar de concentrarte en lo que te molestó, trabaja para resolver el problema en cuestión. ¿Te enloquece que la habitación de tu hijo esté desordenada? Cierra la puerta. ¿Tu pareja llega siempre tarde a cenar? Planifica comer más tarde o come por tu cuenta algunas veces a la semana. Recuerda que la ira no va a solucionar nada y posiblemente empeore el problema.
6. Mantén tus comentarios en primera persona
Para evitar criticar o echar culpas, lo que sólo puede aumentar la tensión, usa oraciones en primera persona para describir el problema. Sé respetuoso y específico. Por ejemplo, puedes decir: «Me molestó que te levantaras de la mesa y no te hayas ofrecido a ayudar con los platos», en lugar de decir: «Nunca ayudas con las tareas domésticas».
7. No guardes rencor
El perdón es una herramienta poderosa. Si permites que la ira y otros sentimientos negativos desplacen a los positivos, es posible que tu propio resentimiento o tu sentido de injusticia te consuman. Pero si puedes perdonar a alguien con quien estás enojado, podrías aprender de la situación y fortalecer tu relación con esa persona.
8. Usa el humor para aliviar la tensión
Tomarse las cosas con calma puede ayudar a aliviar la tensión. Utiliza el humor como ayuda para afrontar lo que te enoja y, posiblemente, las expectativas poco realistas que tengas sobre cómo deberían ser las cosas. Sin embargo, evita el sarcasmo, dado que puede herir los sentimientos y empeorar las cosas.
9. Practica técnicas de relajación
Cuando te sientas exasperado, pon en práctica las técnicas de relajación. Practicar ejercicios de respiración profunda, imagina una escena relajante o repite una palabra o una frase que te tranquilice, como «Tómalo con calma». También puedes escuchar música, escribir un diario o practicar algunas posturas de yoga: lo que sea necesario para relajarte.
10. Cuándo debes buscar ayuda
Aprender a controlar la ira es un desafío para cualquier persona a veces. Busca ayuda para los problemas de ira si tu ira parece estar fuera de control, te hace hacer cosas de las que te arrepientes o hace que lastimes a las personas que te rodean.