Hoy hablaremos sobre la importancia de la psicooncología, definición, qué es lo que busca, los tipos de personalidades, etc.
Según la Organización Mundial de la Salud (OMS), el cáncer es la segunda causa de muerte en el mundo. Uno de cada seis fallecimientos es consecuencia de alguno de sus tipos. De acuerdo con las cifras del Instituto Nacional del Cáncer.
Como profesionales de la salud, buscamos dar respuesta a estas nuevas necesidades de tratamiento. Por otro lado, entendemos, si las demandas psicoemocionales del paciente están contenidas, podremos modificar y mejorar su calidad de vida.
El que está pasando por una enfermedad oncológica no sólo enfrenta problemas de salud, sino que atraviesa un duelo, debido a un conjunto de pérdidas vinculadas a la seguridad y estabilidad que tenía antes del proceso de la enfermedad.
Índice de contenidos
➡️ ¿Qué busca la psicooncología?
La psicooncología, tiene como objetivo el aliviar el sufrimiento de los pacientes desde un enfoque holístico o total. Esto se realiza, a través de un abordaje integral e interdisciplinario del paciente, teniendo muy en cuenta el aspecto biopsicosocial.
Se trata de aliviar síntomas psíquicos y alcanzar una mayor humanización de los tratamientos. Busca dar una contención a las necesidades psicológicas vinculadas con la enfermedad. Por otro lado, estudia las respuestas emocionales de los pacientes, sus familias y el equipo médico; las variables psicológicas, sociales y conductuales que influyen en la prevención, el riesgo y la sobrevida de estos pacientes.
La intervención psicológica en el ámbito oncológico favorece el ajuste emocional en todas estas áreas afectadas. Debemos entender el rol del psicooncólogo en el equipo de salud y lo que la psicooncología tiene para ofrecer. Si logramos potenciar sus resultados, estaremos brindando nuevas herramientas a los avances y las decisiones de la medicina oncológica.
➡️ ¿Qué es la psicooncología?
La psicooncología constituye una rama especializada entre la medicina y la psicología que se ocupa de las relaciones entre el comportamiento, los estados de salud y enfermedad, la prevención y el tratamiento, el fomento de hábitos sanos y la interdisciplinariedad.
Se sabe que el diagnóstico y el tratamiento del cáncer influyen significativamente en el bienestar psicológico. El nivel de ansiedad y depresión es alto para la mayoría de las personas que han sido diagnosticadas con cáncer en comparación la población general.
Las reacciones psicológicas comunes al cáncer son preocupaciones relacionadas con el estado de ánimo y la ansiedad.
Los altos niveles de depresión y ansiedad en respuesta a un diagnóstico de cáncer a menudo son atribuibles a la incertidumbre con respecto a la mortalidad y también a los tratamientos arduos y las preocupaciones relacionadas con la interferencia funcional y la imagen corporal u otros trastornos relacionados con el autoconcepto.
Comprender cómo los individuos reaccionan psicológicamente al cáncer es importante para respaldar su bienestar general y maximizar la calidad de vida durante el tratamiento y más allá.
Si bien la prevalencia de trastornos psicológicos en la reacción al cáncer es relativamente alta en comparación con las normas de la población, muchos individuos reportan un bienestar psicológico bastante estable a través de la trayectoria del cáncer y algunos incluso reportan un mejor bienestar psicológico.
- Véase también: Técnicas psicológicas para pacientes oncológicos
➡️ ¿Cuál es la relación entre el cáncer y las emociones?
La relación entre el cáncer y las emociones fue observada desde hace muchos años. La suma de información nos está mostrando, que tanto las actitudes como los distintos comportamientos de las personas se relacionan con enfermedades puntuales.
De los estudios efectuados, se extrae que existe semejanza entre los rasgos de personalidad de los pacientes con cáncer.
En dichos pacientes se observó:
Sentimientos negativos: Sus procesos pensantes antes de enfermar
experimentaban sentimientos de desesperanza, desolación, frustración, angustia profunda y depresión, esperando la muerte como su única salida.
Estos sentimientos aparecen por no ser capaces de obtener lo que deseaban, o ante una nueva situación de demanda del medio.
👇 Tipo de personalidad de pacientes oncológicos
Estos pacientes tienen una personalidad tipo C, que es opuesta a la personalidad tipo A, quienes son tensos, airados y hostiles, propensos a un ataque cardíaco y distinta al tipo B, siendo éstos más seguros y relajados.
En la personalidad de tipo C, el paciente está negándose a mostrar sentimientos negativos, no expresa miedo, ira o tristeza, por el contrario, es dulce, pasivo y reprimido, necesita controlar las situaciones y ser feliz continuamente. El factor dominante sería el no manifestar las emociones.
👇 Cuatro componentes típicos de pacientes oncológicos
El psicólogo Lawrence LeShan, sobre una investigación a 250 pacientes oncológicos encontró historias de vida similares en estos pacientes, comparado con otros que estaban internados por otras enfermedades.
- Abandono: Los pacientes oncológicos habían tenido una juventud en la cual sintieron abandono, aislamiento y desesperación, manteniendo con sus progenitores individualmente o juntos, relaciones hostiles y tensas; comenzando en esa parte de su vida a sentir el no poder tener una relación profunda con otro.
- Inversión emocional: Como adulto, el paciente obtuvo satisfacción en su profesión, o consiguió relacionarse con una persona haciendo una gran inversión emocional en ese rol transformándose en su motivo de vida.
- Destrucción del rol o relación: Se produjo algún suceso, y el rol o la relación se destruyó, fue despedido o jubilado, el cónyuge murió o se fue, surgiendo la desesperación al no encontrar cómo reemplazar esa falta en su vida.
- Supresión de las emociones: Estos pacientes no permitían que los demás se enterasen de su desesperación, de su enojo, de su dolor, suprimiendo sus emociones como dejando de lado las propias necesidades y deseos y adoptando una personalidad encantadora, siendo considerados por los demás como buenas personas.
El ser bueno parecía indicar que no creían en ellos mismos, ni tenían esperanzas. Su conclusión fue que el 76 % de sus pacientes tenían una historia emocional básica.
Por lo visto anteriormente, el comportamiento más significativo en el paciente oncológico sería la no manifestación de sus verdaderos sentimientos.
Poder expresar aquello que siente y piensa de una manera adecuada, sería de gran ayuda en el proceso de recuperación.
No nos olvidemos que “aquello que no sale bien por la puerta, sale mal y por la ventana”.