La pregunta que nos hacemos es:¿Cuándo se pueda salir después de esta cuarentena o confinamiento obligatorio, que va a pasar?
Es muy posible que poco a poco las personas se vayan acomodando a la nueva situación. Algunas lo harán más rápidamente que otras, pero también habrá individuos que padezcan del Síndrome de la Cabaña o miedo a salir después del confinamiento o cuarentena.
Índice de contenidos
Síndrome de la cabaña
Originalmente se lo llamaba (a principio del siglo veinte) cabin fever, y se produce en personas que han tenido que vivir por un tiempo en espacios estrechos, aislados, monótonos y remotos.
Se ha encontrado este Síndrome con cierta frecuencia, en personas que han pasado por un tiempo de encierro en hospitales, cárceles, o haber sido secuestrados.
Características generales
A continuación vamos a describir las características generales del Síndrome de la Cabaña
Miedo o pánico:
Si bien para algunas personas poder salir de la cuarentena o confinamiento les va a representar un verdadero alivio, para otros individuos les puede producir miedo a los espacios abiertos o agorafobia.
Aislamiento social riguroso:
Algunos individuos han tenido contacto con el exterior, haciendo compras de alimentos, medicamentos o sacar a hacer sus necesidades a su mascota. Pero hay personas, que prácticamente no han salido al exterior desde que se ha instaurado esta cuarentena.
Son sujetos, que han ejercido el aislamiento social de una manera muy rigurosa y son más proclives al Síndrome de la Cabaña. Es muy posible, que no quieran poner un pie en la calle, muy a pesar de que el gobierno lo permitiera.
Hipocondríacos y ancianos:
Serían los que de alguna manera, podrían estar más expuestos. Se caracterizan por tener pensamientos catastróficos, como por ejemplo: “Mejor me quedo en casa, haber si me contagio y me enfermo o me muero”.
Observaciones recientes:
El Síndrome de la Cabaña, se ha podido constatar en personas que han estado algún tiempo recluidas en hospitales, prisión o que han sido secuestrados.
El desconfinamiento
Resulta evidente que el desconfinamiento no va a afectar a todos de la misma manera. Todo esto va a depender de la percepción de cada individuo.
Una de las características del Síndrome de la Cabaña es el predominio de pensamientos catastróficos. “Si salgo a la calle me voy a infectar”, “me voy a contagiar y me puedo morir”.
Este tipo de pensamiento, no sólo va a provocar miedo, sino también aceleramiento de la respiración o hiperventilación, incremento del ritmo cardíaco, y por ende ataques de ansiedad y de angustia significativos.
Las personas que por lo general se aíslan de los demás porque se sienten rechazadas socialmente, se van a aislar mucho más. Esto los va a conducir a no querer salir de la casa, para poder evitar todo contacto social.
Todo esto los va a llevar a encerrarse cada vez más en sí mismo conduciéndolos a una posible depresión.
Agorafobia o miedo a los espacios abiertos
Podríamos decir que el Síndrome de la Cabaña llegaría a producir temor a los espacios abiertos o agorafobia. Este tipo de fobia suele generarse después de un período de confinamiento en aquellos individuos que les costaba salir solos con anterioridad al confinamiento.
A estas personas, son las que les pone mal ir a un partido de fútbol, utilizar un transporte público, hacer la fila en un lugar público, etc.
¿Cuál es el tratamiento?
A) Farmacológico: A través de determinados medicamentos, que serán prescriptos por el profesional pertinente.
B) Psicológico: Pueden ser distintos enfoques: Psicoanálisis, Terapia Cognitiva Conductual, Transpersonal
- El Psicoanálisis trabaja en las causas que dieron origen al trastorno, por lo tanto una vez descubiertas las causas, la cura vendrá por añadidura.
- La Terapia Cognitiva Conductual, busca que el paciente reconozca los pensamientos que le causan pánico, para luego poder modificarlos. También le da importancia a la relajación y a las técnicas de afrontamiento.
- La Terapia Transpersonal, es más moderna y utiliza recursos de la sabiduría oriental. Trabaja con la respiración, la psicomeditación, el desapego o desprendimiento de pensamientos e imágenes tóxicas, la no resistencia, etc.
Técnica del Testigo Silente para afrontar el miedo
A continuación tienen un video de 20 minutos de duración
aproximadamente, es excelente para disminuir nuestros pensamientos
tóxicos (miedos, stress, sistema nervioso, etc). Sirve para armonizar tanto la mente como el cuerpo.
Debajo del video tienes las instrucciones por escrito para buscar la posición y el momento ideal. Hay que buscar un momento del día donde podremos estar tranquilos. En lo personal, considero que durante la noche antes de irnos a dormir sería un buen momento.
- Buscamos la postura más cómoda posible.
- Tratamos de no resistir los movimientos del cuerpo.
- Es necesario percibir y darnos cuenta de las sensaciones de las diferentes partes del cuerpo (cuero cabelludo, rostro, columna vertebral, pecho, abdomen, piernas, brazos, etc) y los movimientos corporales sin querer modificarlos.
- Seamos testigos de las ideas, imágenes, sentimientos, sensaciones, dejando que los contenidos mentales vayan y vengan a su propio ritmo.
- Continuamos profundizando en nuestro interior, soltando todo el fluido mental. Dejamos que la mente piense lo que quiera y poco a poco nos afectará mucho menos. Vamos aprendiendo a fortalecer el Testigo Silente, que no juzga ni condena nada de lo que percibe. Veremos cómo los pensamientos comenzarán a tener menos poder sobre nosotros. De esta manera, produciremos una gran armonía interna introduciéndonos en la paz del Silencio.
- Podemos ir contando del 1 al 10 para ir lentamente volviendo al estado inicial, recuperando las sensaciones de nuestro cuerpo.
- Haremos este ejercicio por un tiempo aproximado de 20 a 30 minutos.